Las tareas propias para conseguir mantener en óptimas condiciones un jardín, vienen dadas por el conocimiento, por parte del profesional, de todos los componentes que integran el conjunto. A tener encuenta sobre:
Las plantas: reconocer la variedad para actuar en las labores de poda, abonado, etc. en consecuencia con sus características y necesidades.
El césped: tener conocimiento de los agentes climatológicos y edáficos que afectan a la cubierta verde, al igual que las necesidades en las distintas estaciones del año con respecto al riego, nutrientes y labores de limpieza y siega.
El riego: trabajar con las últimas técnicas desarrolladas en los sistemas de automatización, conocer los distintos tipos de aspersión, difusión y goteo. Reconocer el tipo de problema que se puede dar en el bombeo o distribución.
Estanque: conseguir el equilibrio entre las plantas, peces y agua para mantener estable la dependencia entre las mismas.
Piscinas: limpieza anual del vaso y mantenimiento en la temporada de baño. Control del PH y cloro, limpieza de fondos y entorno.
Elementos decorativos: limpieza y cuidado de paseos dependiendo de su naturaleza ( terrizo, chamota, adoquín, engravillados, etc.). Reposición de plantas anuales en arriates para dar color la jardín.